Mujer rondera: lucha por sus derechos junto al pueblo

Partido Comunista del Perú – Patria Roja:

MUJER RONDERA – Lucha por sus derechos junto al pueblo Por: Tania Chirinos   Las rondas campesinas son importantes organizaciones de carácter amplio y no discriminatorias, autónomas, patrióticas, democráticas, moralizadoras, reeducadoras y profundamente solidarias, por lo que gozan de prestigio entre la población peruana, principalmente, en el interior del país.   Próximas a cumplir 45 años, las rondas fueron ampliando su ámbito de acción convirtiéndose en verdaderas autoridades e imparten justicia en sus comunidades. Esta singular expresión organizativa cuenta con un marco normativo de protección nacional e internacional, rige su accionar por su Derecho Consuetudinario, Estatuto, Reglamento y la difusión y defensa irrestricta de los Derechos Humanos. Es importante resaltar lo estipulado en al Art. 3 numeral 6 de su Estatuto que señala “Contribuir a la difusión, promoción y defensa de los derechos humanos individuales y colectivos, priorizando la atención de los derechos del niño, del adolescente, de la mujer, de los ancianos y de las personas con discapacidad y desprotegidas.” Coherencia y autoridad moral Siendo responsables y coherentes con lo que predican a lo largo de su trabajo y lucha despliegan avances, todavía discretos, con respecto a la defensa de los derechos de las mujeres. Labor desarrollada con trabajos desde las bases que confluyen en eventos regionales y nacionales de mujeres ronderas para capacitarse, reflexionar e intercambiar experiencias sobre su situación específica y particularidades de la problemática femenina con la finalidad de fortalecer la institucionalidad rondera y promover una mayor participación, concientización y valoración de las mujeres, poniendo énfasis en que quien asume responsabilidad dirigencial debe gozar de reconocimiento y autoridad moral. Es decir, predicar con el ejemplo, caso contrario, serán evaluados y sancionados. Las ronderas y ronderos, se autoidentifican como miembros de pueblos originarios o indígenas y afirman su identidad cultural, exigiendo el respeto a su tradiciones y espiritualidad, por lo que rechazan toda forma de discriminación y racismo en la sociedad y en los medios de comunicación que las estigmatizan y mercantilizan. No podemos dejar de resaltar las cualidades de las mujeres ronderas, su firmeza y claridad con respecto a la institucionalidad de la Cunarc-Perú; los denodados esfuerzos por su reconocimiento y valoración como participantes y/o dirigentes; el saber escuchar, superar y resolver dificultades que siempre se presentan; la iniciativa, el ingenio y creatividad, su profundo espíritu de solidaridad colectiva Forjadoras de unidad La unidad es un principio irrenunciable en el accionar ronderil, valorado, practicado y respetado…

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